Introducción: ¿Qué es el Cyberbulling?
El cyberbullying, o acoso digital, es una forma de violencia psicológica que se produce mediante el uso de dispositivos electrónicos y plataformas digitales: redes sociales, apps de mensajería, foros, videojuegos en línea o cualquier espacio virtual donde se interactúe.
Consiste en actos repetidos de hostigamiento, insultos, amenazas, humillación pública o difusión de contenido ofensivo, con la clara intención de dañar emocionalmente a la víctima.
Contrario a la creencia de que se trata solo de una “broma pesada” o “cosas de chicos”, el cyberbullying es un delito, y como tal, puede tener consecuencias jurídicas graves tanto para menores como para adultos.
¿A quién afecta?
Aunque el término suele asociarse a adolescentes, el ciberacoso no distingue edad ni perfil. Puede afectar a:
El daño no siempre es visible, pero es profundo. Diversos estudios han confirmado que el acoso online puede generar ansiedad, depresión, trastornos del sueño, aislamiento social e incluso ideación suicida.
Tipos de conductas que constituyen cyberbullying
El cyberbullying se manifiesta de muchas formas, y es importante reconocerlas para identificar si se está cometiendo o sufriendo un delito:
Estas conductas pueden parecer inocuas o pasajeras, pero si son reiteradas o tienen una clara intención de dañar, la ley las contempla como acciones punibles.
¿Qué dice la ley?
En España, no existe un delito tipificado específicamente como “cyberbullying” en el Código Penal, pero sí existen múltiples figuras jurídicas que lo abordan en función del caso concreto. Entre ellas:
Además, si el agresor y la víctima son menores de edad, entra en juego la Ley Orgánica de Protección Jurídica del Menor, que refuerza las medidas de protección y puede implicar también consecuencias para los tutores legales.
¿Qué consecuencias legales puede tener?
Las penas varían en función del tipo de conducta, su gravedad y si existen agravantes como:
Algunas posibles consecuencias:
Además, en el ámbito civil, la víctima puede reclamar una indemnización por daños morales si se demuestra el sufrimiento ocasionado.
Conclusión
El cyberbullying no es un simple problema de redes sociales: es una forma de violencia que puede dejar secuelas reales y profundas. Y como toda forma de violencia, debe abordarse con seriedad, sensibilidad y herramientas legales eficaces.
Si estás atravesando una situación de acoso digital, o conoces a alguien que la esté sufriendo, no estás solo/a. Desde nuestro despacho podemos ayudarte a:
- Evaluar si hay delito
- Denunciar de forma segura
- Proteger tus derechos e intimidad
- Reclamar una indemnización si corresponde
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